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Dolors Marin Tuyà.
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Lluís Maria Xirinacs.
Artículos publicados en el diario Avui, cuando Lluís Maria Xirinacs era senador independiente en las Cortes Constituyentes españolas, entre los años 1977 y 1979, traducidos al castellano.

Diario de un senador.
Lluís Maria Xirinacs.
Artículos publicados en el rotativo Mundo Diario, cuando Lluís Maria Xirinacs era senador independiente en las Cortes Constituyentes españolas, entre los años 1977 y 1979.

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Introducción al Sistema General.
Magdalena Grau,
Agustí Chalaux.

¿Necesitamos a Gandhi?

Ara.cat. Logotipo.Ara. Sábado, 28 de Septiembre de 2019.

150 años del nacimiento del líder de la No-violencia.

¿Necesitamos a Gandhi?

El pensamiento de Mahatma no ha impregnado la política de los gobiernos, pero está en el corazón de muchos movimientos sociales actuales.

Tiempo estimado de lectura: 9 minutos.

¿Necesitamos a Gandhi?

Artur Domingo i Barnils. Historiador.

Cuando observamos la deriva de un mundo en crisis, tanto en el ámbito ecológico como en cuanto al incremento de las desigualdades, el belicismo y las violencias crecientes, los millones de refugiados y desplazados, y las amenazas constantes a los derechos básicos y las libertades, es oportuno preguntarse, ahora que se conmemora el 150º cumpleaños de su nacimiento, cuál puede ser el papel de las ideas y el legado de Gandhi. Dicho de otro modo: ¿tiene que ser considerado una reliquia del pasado o una esperanza para el futuro?

Es una evidencia que su mensaje, basado en ideas como la no-violencia, la fraternidad, la vida sencilla y la justicia social, no ha impregnado la política ni la geopolítica de los estados ni de los principales mandatarios del mundo actual. Se hace difícil encontrar hoy a alguien, dentro de este universo, que nos aporte el más mínimo eco, a pesar de que muchos de ellos visitan y ofrecen la ofrenda al memorial dedicado a Mahatma en sus visitas de estado en Delhi. Es todavía más penetrante el hecho de que en la India mismo, donde oficialmente se le considera el padre de la nación, la política gubernamental se haya alejado, día tras día, de su mensaje. Y este alejamiento es más patente bajo el gobierno fundamentalista de Narendra Modi, que ha emprendido una deriva claramente autoritaria, la última manifestación de la cual ha sido la suspensión del estatuto especial para Cachemira, con todas las consecuencias que comporta y comportará.

Y, aun así, el legado de Gandhi es vivo e influye movimientos y teorías que buscan transformar este mundo en un lugar más justo y habitable para todo el mundo. Influyó en Luther King y el movimiento por los derechos civiles en los EE. UU., pero también en César Chávez, defensor de los campesinos; en el italiano Lanza del Vasto, así como en Nelson Mandela... y en pensadores como Gene Sharp, E.F. Schumacher, Ivan Illich o Vandana Shiva, entre otros muchos. En nuestro país marcó también a Lluís M. Xirinacs. Sería largo mencionar la gran cantidad de estudios y debates que han generado, y generan, su pensamiento y su experiencia.

En cuanto a los movimientos sociales y políticos, el mensaje de Gandhi ha tenido un impacto creciente en las últimas décadas. Cuando el 1980 se fundó el partido Los Verdes en Alemania, la influencia de las ideas de Gandhi fue remarcable en muchos ámbitos, sobretodo en lo referente a la propuesta de una economía y organización social respetuosas con la naturaleza y contrarias al derroche, así como en la no-violencia. En muchos de los movimientos sociales surgidos en todo el mundo en los últimos tiempos, la idea de la no-violencia ha sustituido a menudo viejas ideas sobre la eficacia de los enfrentamientos violentos, si bien, desgraciadamente, no es un camino fácil.

Podemos recordar, en este sentido, la experiencia del 15-M, en 2011, en varias ciudades del estado español, en que en las manifestaciones y concentraciones aparecieron citas de Gandhi y referencias a sus propuestas. Y tenemos la evidencia de que en el movimiento soberanista catalán las apelaciones a la no-violencia, como también las referencias a Gandhi y la desobediencia civil, son frecuentes y uno de sus principales argumentos.

¿Por qué interesa Gandhi, hoy?

Ciertamente, estamos asistiendo a un redescubrimiento de la persona y su obra y a un interés creciente por su mensaje. ¿Por qué? Seguramente porque, cuando estamos viviendo una profunda crisis y se han demostrado ineficaces muchas de las respuestas tradicionales a los problemas humanos, nos damos cuenta de que Gandhi se planteó algunas de las grandes preguntas y retos que tienen que encarar la sociedad y cada ser humano, retos que ahora se convierten de una enorme relevancia para nuestro futuro y el del planeta. Y ofreció, además, algunos caminos que, cuando menos, merece la pena explorar. Pero las aportaciones de Gandhi no se limitan a los medios de lucha que hay que utilizar contra la injusticia, ámbito en el cual sobresalió, sino que abrazan algunas cuestiones profundas, perennes y actuales.

Sin duda, la aportación más conocida es su defensa de la no-violencia, una no-violencia profunda que va desde el fondo del individuo hasta las relaciones sociales y económicas, incluyendo la resolución de los conflictos y los medios de lucha. Sus campañas, denominadas satyagraha, combinaban dos conceptos básicos: ahimsa (no-violencia) y satya (verdad). Y demostró, a menudo, la eficacia.

La opción por los más desfavorecidos le llevó a luchar contra la institución de la intocabilidad, producto del sistema de castas en la India que condenaba a los llamados intocables a vivir discriminados y en condiciones paupérrimas. Pero le llevó también a luchar en favor de los campesinos pobres, de los trabajadores y de las diferentes comunidades del país. Se manifestó en favor de la igualdad de las mujeres, en una sociedad tan patriarcal como la de la India de la época, y todavía actualmente, lo cual le generó la complicidad de muchas de ellas. Fue por razón de esta identificación con la gente más sencilla y oprimida que adoptó una vida austera.

En el plan económico y social, defendió que la economía tenía que estar al servicio de las personas y no al revés, que tenía que estar presidida por la ética y no por el beneficio de unos cuantos. Propugnaba un sistema económico descentralizado y en armonía con la naturaleza. Fue muy crítico con el maquinismo y la tecnología, sobre todo si esta no estaba al servicio del bienestar de la sociedad, así como con el consumismo superficial como finalidad. Por eso muchos ecologistas le consideraron un referente y, en los últimos años, los defensores de las teorías de un decrecimiento económico, para evitar el colapso en el cual parecemos abocados, reivindican muchas de las ideas de Gandhi.

Por otro lado, propugnó el diálogo interreligioso e intercultural, en lugar del enfrentamiento, y vinculó la lucha por la transformación de la sociedad en un sentido más justo con la propia lucha personal de cada individuo para mejorar éticamente, como la única vía real de transformación, sin separar el ámbito social del individual; y nos mostró un estilo de liderazgo no demagógico, ni sectario, sino responsable y basado en el ejemplo y la coherencia.

Aun así, el peor servicio que se puede hacer a su obra es santificarlo, porque esto lo haría inoperante. Gandhi fue un ser humano, con sus contradicciones y errores, que buscó honestamente un camino de realización que le llevó a dedicar su vida al servicio de las causas que consideró justas, en una investigación permanente hasta el fin de su vida. Y esta investigación la hizo en diálogo con otras tradiciones, puesto que se interesó no sólo por sus raíces indias, sino también por las teorías y escritos de Tolstoi, Thoreau y Ruskin, entre otros muchos. Recuperar y actualizar el legado de Gandhi, para hacer una cosa viva, requiere hacerlo dialogar con otras tradiciones y propuestas surgidas en Oriente y Occidente que buscan también respuestas para evitar el colapso y enderezar, si todavía es posible, el futuro de nuestro mundo en crisis.

Cronología.

Como un joven de buena familia se convirtió en padre de la nación india y referente de la lucha no-violenta.

1869. Nacimiento y estudios en Londres.

Mohandas Karamchand Gandhi nació el 2 de Octubre de 1869 en Porbandar, en la India británica, en el seno de una familia de la casta comerciante. Su padre, Karamchand Gandhi, fue un primer ministro local, y su madre, Putlibai, le enseñó a no hacer daño a ningún ser vivo, a ser vegetariano y a ser tolerante con las diferentes sectas religiosas. Gandhi no fue un buen estudiante pero en 1887 fue a Inglaterra, donde se licenció en derecho. Después intentó ejercer de abogado en Bombay, sin mucho éxito.

1893. Suráfrica y la conciencia política.

El 1893 acepta un trabajo en Natal, en Suráfrica, donde comprueba de primera mano la marginación que sufren los indios y el resto de minorías que viven. El 1906 organiza la lucha no-violenta contra una ley que obligaba a todos los indios del Transvaal a registrarse. Durante 7 años será encarcelado varias veces.

1915. Retorno a la india y lucha por la independencia.

El 1915 vuelve a la India, donde entra en contacto con el Partido del Congreso, que encabeza la lucha por la independencia del país. El 1921 obtiene el poder del partido, que reforma para hacerlo de masas y poner en práctica sus métodos de lucha, como el boicot a los productos británicos o la no-cooperación.

1930. La marcha de la sal y la desobediencia.

Entre el 12 de Marzo y el 6 de Abril de 1930 Gandhi y un reducido grupo de seguidores hicieron una marcha de 300 kilómetros para hacer un llamamiento a desobedecer el monopolio británico sobre la sal. Sus seguidores empezaron a recoger sal sin permiso. Las autoridades encarcelaron a 60.000 ladrones de sal.

1942. Arrestado por los británicos.

Los británicos arrestaron a Gandhi y todo el Comité de Trabajo del Congreso en Agosto de 1942. Gandhi fue retenido durante dos años en el palacio del Aga khan, durante los cuales murieron su mujer y su secretaria. Lo liberaron en 1944 por su precario estado de salud a causa de los ayunos y porque no se convirtiera en un mártir.

1945. Opuesto a la partición de India.

Al final de la guerra, Londres dio la orden de transferir el poder a manos indias. Gandhi gritó a la lucha y consiguió la liberación de 100.000 presos políticos. El líder pacifista se opuso al plan de partición de la India (la creación del Pakistán y Bangladesh, de mayoría musulmana), pero la violencia interreligiosa le obligó a rectificar para evitar una guerra civil. Aun así, el día de la independencia de la India Gandhi no lo celebró y pasó la jornada encerrado en su domicilio de Calcuta.

Enlace del artículo original en catalán:

https://www.ara.cat/dossier/llegat-inspirador_0_2316368355.html


Enlaces relacionados:

38 ideas fuerza para avanzar en una estrategia civil noviolenta que haga frente a usurpaciones de las instituciones o golpes de estado y a agresiones exteriores o ocupaciones territoriales. Gene Sharp.

La revuelta pacífica (1). Entender la estrategia de la no violencia. Eduard Peris y Xavier Carmaniu.

La revuelta pacífica (2). Gandhi y la perseverancia de la no violencia. Eduard Peris y Xavier Carmaniu.

La revuelta pacífica (3). Serbia: Doce jóvenes tumban la dictadura de Milosevic. Eduard Peris y Xavier Carmaniu.

La revuelta pacífica (4). Solidaridad: las mujeres invisibles de la resistencia no violenta polaca. Eduard Peris y Xavier Carmaniu.

La revuelta pacífica (y 5). ¿Qué se esconde detrás la historia de Rosa Parks? Eduard Peris y Xavier Carmaniu.

La revuelta pacífica. El hombre que tumbaba dictaduras con libros: Gene Sharp (1928-2018). Eduard Peris.

Pepe Beúnza: «Cuando quieres cambiar una sociedad injusta y violenta debes asumir riesgos y uno de ellos es la cárcel». Surtdecasa.cat.

Lluís Fenollosa: «El conflicto que se gana por la fuerza siempre rebrota». El Periódico de Catalunya. Gemma Tramullas.

Porqué hay que llevar un lazo amarillo. Pepe Beúnza.

Las múltiples caras de «nuestra sal». Lluís Planas Herrero.

Comentarios sobre el 1-O. Pepe Beúnza.

Pepe Beúnza: «Si no fuera por la desobediencia civil, todavía estaríamos en las cavernas».

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Acto de recuerdo del legado de Xirinacs en el barrio barcelonés de la Sagrada Familia.

Bruselas «si el Estado impide el 1-O».

Vaga de fam per Catalunya. Diari de vint-i-un dies (Huelga de hambre por Cataluña. Diario de veintiún días). Lluís Maria Xirinacs (pdf, en catalán).

L'espectacle obsessiu. Diari de presó-I/1974 (El espectáculo obsesivo. Diario de prisión-I/1974). Lluís Maria Xirinacs (pdf, en catalán).

Entro en el gran buit. Diari de presó-II/1975 (Entro en el gran vacío. Diario de prisión-II/1975). Lluís Maria Xirinacs (pdf, en catalán).

La no-violència en la pau i en la guerra (La no-violencia en la paz y en la guerra). Mohandas Karamchand Gandhi (pdf, en catalán). Introducción: Lluís Maria Xirinacs (en castellano).

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